Si en el mundo de las zapatillas existiese una fuente de la eterna juventud, no hay duda de que las Adidas Gazelle pudieron caer en ella. Desde su llegada en el 68, lo que comenzó siendo una zapatilla para el alto rendimiento en el deporte, se ha ido reinventándo década a década pasando por todo tipo de estilos y subculturas.
Siguiendo el increíble éxito de las Stan Smith, Adidas quiere convertir las Gazelle en su próximo best-seller retro. Y no van mal encaminados.
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Al igual que muchos de los productos de Adidas Originals, la sencillez es la característica clave de la Adidas Gazelle. Quizás esta sea la cualidad que la ha convertido en un icono atemporal. Fue uno de los tenis más populares para entrenar hasta finales de la década de los 1970 y ahora es una de las zapatillas más destacada en la moda urbana.
Las Gazelle tuvieron que correr, y mucho…
Entre el 72 y 79, las zapatillas Gazelle entraban y salían del catálogo de Adidas. En esa época se crearían la Adidas Jaguar (llamada así por ser la némesis depredadora de la gacela) pero la carrera por la supervivencia no duró demasiado.
Cuando parecía que la zapatilla caería en el olvido, la revista ‘Popeye’, biblia japonesa de la moda, incluía a las Adidas Gazelle como el estilo de zapatilla que marcaría la tendencia en el futuro. Y a pesar de crearse otros modelos de Adidas con la misma estética que las Gazelle, ninguna tendría el éxito de nuestra protagonista.
El renacer de las zapatillas Adidas Gazelle
Adidas introducía en 1979 el concepto Special, lo que venía siendo una actualización de viejas glorias para mantener su estatus de “zapatillas pro”. Debutaban así las Gazelle Special, con una suela transparente en la que destacaba el logo retro de Adidas.
Es en este momento cuando las Gazelle (y las Adidas en general) se convirtieron en un auténtico rito de iniciación para miles de jóvenes británicos. Se trataba de una zapatilla asequible y fácil de conseguir. A medida que el boom del hip-hop se extendía por Europa, productos básicos de la escena neoyorquina como las Superstars o las Campus se podían ver en la carátula de los discos, pero más allá de los Estados Unidos, eran escasas hasta su reedición en la década de los 90. Las Gazelle eran lo más parecido, y su reputación las hicieron muy queridas.
Y aunque han sido los hooligans del fútbol los que han llevado a Adidas en volandas desde finales de los 70 hasta la acutalidad, la danza, la música y el arte también fueron clave a la hora de impulsar la popularidad de las Gazelle.
Grupos como los Beastie Boys, Oasis, Blur, Suede (nombre muy apropiado para esta historia), los mismos Rolling Stones o los personajes de películas como Trainspotting, hicieron que las Adidas Gazelle fuesen el centro de atención, convirtiéndose en un artículo esencial de algunas supermodelos de los 90. Kate Moss las usaba religiosamente y la imagen de Helena Christensen con solo las Gazelle puestas pasó a la historia.
Y así se han ido poco a poco haciendo un hueco en el competitivo mundo de las zapatillas deportivas hasta hoy.
La última iteración de las zapatillas Adidas Gazelle ha sido creada por el diseñador Jean Khalifé basándose en los modelos de principios de los 90. Tuvieron que rehacer todos los planos y dibujos técnicos, consiguiendo la réplica perfecta, milímetro por milímetro y puntada por puntada:
Siendo una zapatilla tan emblemática, no puede faltar en el armario de todo amante del estilo urbano. Y en eso somos unos expertos en Dacks Company, por eso podrás encontrar las zapatillas Adidas Gazelle en nuestro catálogo.
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