Seguimos con nuestro viaje a través de las zapatillas de skate que marcaron un antes y un después en el diseño de este tipo de calzado. Si todavía no has leído la primera parte, te invitamos a conocer la historia de las Chuck Taylor All Star y las Randy 720.
Los diseños más emblemáticos que revolucionaron las zapatillas de skate
Vans Era
Marzo del 66. La Van Doren Rubber Company abría sus puertas de la mano de dos personas que ya te suenan: James y Paul Van Doren que junto a dos amigos, Gordon C Lee y Serge D’Elia, fabricaron zapatillas que vendían directamente al público.
El propio día de su inauguración, la empresa solo había fabricado los modelos de exposión: las cajas de los estantes estaban vacías. Hubo una quincena de clientes, y después de haber elegido las suyas, les pidieron que regresaran a la tarde mientras Van Doren y Lee se ponían a confeccionarlas en la fábrica.
Cuando los clientes regresaron a recoger sus zapatillas nuevas, Van Doren y Lee se dieron cuenta de que se habían olvidado de tener dinero disponible para el cambio. Ese día los clientes pudieron irse con las zapatillas y les pidieron que fuesen al día siguiente a pagar (entre 2.4 y 5 dólares de la época). Todos lo hicieron.
Un inicio único de una zapatilla más que emblemática: una parte superior de lona con cordones y doble costura, lengüeta acolchada y forro. En la suela, el gofre patentado por Vans, haciendo una zapatilla ligera y durarera con un agarre extremo.
Las Vans no adoptaron el skateboarding hasta 1975. La #95 (ahora conocido como la Vans Era), fue diseñada por Tony Alva y Stacy Peralta, del equipo de patinaje Z-boys de los años 70. En ese momento comenzó la relación de la marca con la comunidad del skate.
Esta minimalista zapatilla de perfil bajo se convertiría en un clásico, con una silueta muy ligada al a este deporte. Las Vans se adentraban en la escena del skate de California del sur a la vez que se convertían en una marca multimillonaria.
Ahora, Vans es más que un nombre familiar cuando hablamos de marcas de zapatillas de skate. Posiblemente, la más reconocible.
Nike Air Jordan 1
Cuando las Nike Air Jordan 1 llegaron en 1984 fueron casi abandonadas por completo. La historia cuenta que en cuanto el propio Michael Jordan salió a escena con ellas, David Stern, el Comisionado de la NBA en ese momento, las prohibió por ser unas zapatillas con muy poco blanco en ellas (aunque todo apunta a que es precisamente eso, una historia).
Quizás ese toque rebelde fue el que ayudó a que las Air Jordan 1 irrumpieran en la escena del skateboard. Por supuesto, el enfoque principal se centró en el baloncesto, sin embargo, su versatilidad y capacidad sobre el skate en innegable.
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Con una parte superior de cuero, suela exterior de goma, y un soporte para tobillos increíblemente resistente, era la zapatilla perfecta para skaters.
El constante lanzamiento del diseño clásico es un gran ejemplo de su popularidad y calidad. Y luego está el tema de lo bien que se ven…
Osiris D3
Las Osiris D3, diseñadas por David Mayhew, un skater relativamente poco conocido de Wisconsin, fueron las terceras que diseñó para la marca. Quería apartarse de la estética habitual de las zapatillas de skate y crear algo loco… lo cual hizo totalmente.
La zapatilla era rara, enorme y tenía unos cordones demasiado largos. 6 meses después de exhibirse en una feria, y lanzadas en el año 2000, comenzaron a despegar.
Y casi tan pronto como lo habían hecho, desvanecieron.
Sin embargo, seis años después de su lanzamiento, justo cuando estaban a punto de ser retiradas, las ventas del D3 volvieron a explotar. Estrellas como Avril Lavigne y Fred Durst de Limp Bizkit llevaban las Osiris D3. BAM.
Lo que es casi universalmente aceptado es su calidad y durabilidad, incluso en condiciones extremas de uso. Son cómodas, muy acolchadas y ofrecen una gran protección. Y lo que es más importante, una gran sujección del tobillo.
Es imposible imaginar la zapatilla de skate definitiva: la gente siempre compra según sus preferencias, y hay muchísimos diseños diferentes que se adaptan a diferentes necesidades. Pero sea cual sean tus gustos, en Dacks Company seguro que tenemos el modelo perfecto para ti.